lunes, 6 de noviembre de 2023

Los 85 de Alci Acosta

Una edad venerable a la que ha llegado Alci Acosta, año que parece ser el de su retiro. Alcibiades Alfonso Acosta Cervantes nació en Soledad, el cinco de noviembre de 1938. Tuvo lecciones de piano con Ana Carrasquilla y, luego, en la Escuela de Bellas Artes de Barranquilla. Ya formado musicalmente, le faltaba conocer a un gran compositor. Ello ocurrió en 1965, cuando se encontró con Cristóbal Sanjuán, quien puso en sus manos el primer éxito: Odio gitano. Todas las canciones de álbum Son recuerdos pertenecen a Sanjuán, excepto una del propio Alci.


La dupla Acosta - Sanjuán, en el elepé Son recuerdos. Como siempre, la anécdota
va en el sentido de que Acosta terminó de cantante accidentalmente...


Las coordenadas de su obra son el despecho y la cantina, el refugio del que tiene sed material y espiritual*. Hay otro Alci, sin embargo: el del gran repertorio universal. En un rincón del alma (A. Cortez), No (A. Manzanero), Ole (L. Demetrio - versión de Celia), Yo soy aquel (M. Alejandro), Amor de pobre (P. Ávila), Enamorada de un amigo mío (R. Carlos), Cenizas (Wello Rivas), Dos rosas (Bernardo Ortiz - versión de Wilfrido), Se me olvidó otra vez (J. Gabriel), Rompamos el contrato (H. Nelson), Hola, Soledad (P. Ortega), El rey (JA Jiménez), incluso una composición optimista como Un mundo diferente (Ó. Arriagada). Alci grabó una composición de Lolita de la Colina, Quiero volver a ser tu amante. Hizo también la famosa Amor perdido (P. Flores), Lágrimas negras (M. Matamoros), Cien mil cosas (JD Quiñones - versión de Celio González), Mi barca (Portoles - Larrea), ¿Por qué ahora? (B. Capó - versión de Vitín Avilés), Para que no me olvides (Ray Girado - Versión de Rubby Pérez)

Grata sorpresa es la versión que hizo a dúo con Julio Jaramillo de Cuando salí de Cuba (L. Aguilé). Otra curiosidad notable es su versión de Periódico de ayer (T, Curet), arreglada por Naldo Campos.


Sing Sing

La famosa prisión gringa anduvo de boca en boca gracias a la canción de Bienvenido Brens, primero vocalizada por José Feliciano (el Ray Charles de Puerto Rico), en 1967; luego por Alci Acosta (parece que la primera versión es de Palmenia Pizarro, 1966). La prisión, de máxima seguridad, tuvo la cámara de ejecución del Estado de Nueva York hasta que se abolió la pena capital, en 1977. Hay planes de convertir parte del presidio en museo; en todo caso, Eddie Palmieri ya dio un concierto allí, en 1972.

Sanjuán, el descubridor de Alci.

*Muchos han visto en la cantina un espacio materno, acogedor y de evasión. Fernando Savater la definió como "un territorio en esencia materno, hospitalario". En la cantina (D. Santos) de Daniel Santos y Julio Jaramillo, hay una estrofa sintética: "La cantina es el oasis / del que tiene sed de besos, / del que tiene sed de abrazos, / del que tiene sed de amor". Moscoso. M. (1999). La canción de rocola. Quito: El Conejo.

sábado, 28 de octubre de 2023

Bugalú, primera entrega

En esta vereda tropical, tarde o temprano había que toparse con el bugalú: así, sin abundancia de oes, pues también es cosa hispana y la escribimos conforme a las normas de nuestro idioma.

No podemos desaprovechar el habernos encontrado con la anécdota del nacimiento de uno de sus clásicos: Bang, Bang!*. The thing goes like that: Juan Flores principia su ensayo** sobre bugalú citando a Jaime (así le decían entonces) Sabater: "Let's just try it out, Sonny. If it doesn't work, I'll buy you a double". Sabater se refería a que el Sexteto estaba tocando su repertorio pero la gente permanecía sentada. Sonny, es decir, Joe, se mantenía fiel a las canciones del último disco pero, al final del segundo set, decidió hacerle caso al timbalero. Jaime fue con el pianista, Nick Jiménez, con las instrucciones de lo que tenía en mente. En su recuerdo, no alcanzó a volver a su puesto del timbal cuando la gente llenaba la pista, al grito de "bi-bi, ah". El éxito fue inmediato, así como la aparición en el listado de Billboard, superando incluso los registros de El pito, el año anterior.


Cuba y Sabater en la composición de estos números, muy onomatopéyicos:
al otro lado, Push, Push, Push.


Como afirma Flores, el bugalú fue el punto de encuentro de dos grupos que llevaban tiempo compartiendo el espacio físico. Afroamericanos y latinos compartían, además, el espacio de la fiesta y, por fin, encontraban una tierra común para el baile y la música. El ambiente de fiesta se siente claramente en las grabaciones. Culturalmente, coincide con el movimiento de los derechos civiles y con la madurez de la primera generación de nuyoricans. El éxito les llegó pronto a estos jóvenes: espacio en la radio, buenos contratos e, incluso, un comercial de gaseosa. Llegaron a compartir tarima con James Brown y a extender su influencia a los músicos de Puerto Rico.

Para Flores, los antecedentes del bugalú van de To Be With You, de Willie Torres, "the all-time classic Latin soul ballad", a Watermelon Man, de Mongo Santamaría. El Watusi asimismo tiene elementos que serán del bugalú, como el aplauso que acompaña la línea fija del bajo. La letra, según recuerda Willie Torres, se improvisaba in situ.


El bugalú colombiano fue un encargo. Las relaciones entre
jalajala y bugalú están por averiguar.


Otro artista de la onda, autoproclamado el rey, fue Pete Rodríguez, con sus dos clásicos: Micaela y I Like It Like That, composiciones de Pabón y Rodríguez. Colombia participó de esta corriente, cuando el genial Ricardo Rey le dedicó Colombia's Boogaloo.

De esta moda participó hasta su contradictor, Eddie Palmieri, con las piezas Ay, qué rico y The African Twist, cantada y compuesta por Cynthia Ellis. 


Llama la atención la descarga Son, cuero y boogaloo, de Fania (1968), composición de Ray Barreto, variante de su Son con cuero.


*Debe analizarse el hecho de que, en 1966, hay varias canciones con dicho nombre.

**Flores, J. (2000). From Bomba to Hip-hop: Puerto Rican Culture and Latino Identity. New York: CUP.


El bugalú en números.


El alcance de la fiebre del bugalú puede calibrarse por los registros que alcanzaron en las listas de Billboard.


Iniciando por Bang Bang, Efectivamente, el tema debutó en el # 94, el 22/10/1966, y logró su mejor momento, apenas tres semanas después, llegando al # 63, el 26/11, y ajustando ocho semanas en lista. En la otra Costa, el Sexteto llegó al tercer lugar de la KGFJ, radio de los Ángeles.

El pito no está registrado en Billboard, pero sí Oh Yeah!, que ingresó por el # 85, el 7/1/1967, y trepó al # 62, el 28/1/1967, manteniéndose cinco semanas en lista.

Pete Rodríguez, al parecer, no alcanzó a entrar en listas. Héctor Rivera debutó en el # 49, el 31/12/1966, con At The Party, alcanzando el # 26, el 11/2/1967.



Si este álbum está bien datado (1965), habría que revisar la cronología...


Ñapa. Entre las anécdotas interesantes de esa época, se refiere que la popularidad de Joe Cuba llegó al punto de compartir tarima con James Brown. Una vez, en el Madison Square Garden, repartieron cinco mil pitos entre el público, con el consiguiente despelote. Brown no volvió a invitarlos de teloneros.

La fiebre del bugalú pasó rápido: Joe Cuba apenas se dio cuenta, antes que llegara Pacheco a barrer con su pachanga...


domingo, 1 de octubre de 2023

¿Vamos a Maracangalha? Dorival Caymmi en las Antillas

Sabíamos hace tiempo que Héctor Lavoe cantó un número enigmático, de título Vo so, El voso, etc., en 1973. La cosa se iba aclarando al descubrir que se trataba de una canción brasileña, medio adaptada al español, Maracangalha, de don Dorival Caymmi.

Maracangalha es un samba de Dorival Caymmi, cuya letra dice: 


Eu vou prá Maracangalha / eu vou! (...) / Eu vou convidar Anália / eu vou! / Se Anália não quiser ir eu vou só! 


Maracangalha, en un 78 de Odeón.


De esta última frase sale el título de la canción. En los discos de Willie Colón, llama la atención que se atribuya la canción, sin mencionar a Caymmi. Maracanlgalha era un lugar con fábrica de azúcar, donde tenía negocios un amigo del compositor. La obra se grabó en la Odeón, con buen éxito en la radio y luego en el carnaval de 1957*.  


Una grata sorpresa fue encontrarse otra versión del samba, esta vez por el Combo de Cortijo. En el elepé Fiesta boricua (1960), viene al cierre Me voy a Maracangaya, tan bien adaptada al español que el nombre de la población va con ye.

Desde 1957, circuló en el Cono Sur la partitura y versión castellana de Rafaelmo, de Maracangalha, "éxito brasileño - samba alegre".

La versión de Rafaelmo no la usaron ni Rivera ni Lavoe.
El PDF está disponible en jobim.org


Caymmi con Tom Jobim interpretando Maracangalha.

Dicionário Cravo-Albin, s. v. Dorival Caymmi.


lunes, 19 de junio de 2023

Astrud Gilberto, The Girl from Ipanema

La primera cosa que llama la atención de la biografía de Astrud Gilberto es que, como el refrán, no fue profeta en su tierra. Tampoco era Gilberto su apellido, sino de su esposo: Joao Gilberto. Como esposa de un reconocido músico estaba en el estudio de grabación donde se estaba produciendo un disco. Y resultaba que la señora del músico cantaba...


Astrud Gilberto. Foto: Wolynski. Ipanema es palabra tupí
que casi se pierde en la versión inglesa de la canción.


Miedo de palco

Astrud Evangelina Weinert (Salvador, Bahía: 29 de marzo de 1940) era hija de un alemán, profesor de idiomas, y se expresaba en varios, entre ellos el inglés. Lo musical le venía por su madre, aficionada a la música e intérprete de mandolina. Astrud cantaba, pero era muy tímida y sufría de pánico escénico. Sin embargo, debutó en el primer concierto de bossa nova: Noite do Amor, do Sorriso e da Floren 1960, acompañada por su esposo. A pesar de eso, Astrud se consideraba "la esposa que canta", sin tomarse en serio la premonición de Stan Getz sobre su brillante futuro*, luego de poner su voz en dos temas del elepé Getz/Gilberto, en 1963. En la grabación, Joao y Astrud hicieron dueto pero, comercialmente, se decidió lanzar un sencillo con la sola voz y versión inglesa de The Girl from Ipanema**. A ella le pagaron la tarifa corriente de músico de sesión. Como en el disco, el matrimonio se separó un par de años después.

En todo caso, Astrud inició su carrera con un clásico y no podía menos de seguir su carrera musical en solitario. No era poca cosa estar nominada al premio de nuevo artista, en 1964, y perderlo ante The Beatles; aunque ganaran el Grammy por la mejor grabación. Ni era poco que figuraran, con Stan Getz, en el musical Get Yourself a College Girl (1964) y en The Hanged Man (1964). En 1965, ya era corriente verla en la televisión norteamericana y europea. Sin embargo, se quejaba la artista de que en su Brasil brasileiro la ignoraban, ya en 1969. El título de la entrevista en que se quejó no requiere traducción: O Brasil não me aceita***. En todo caso, Astrud hizo gira nacional con Getz, quien la invitó a grabar el disco Getz Au Go Go (1964), antesala del primer trabajo independiente, The Astrud Gilberto Album (1965). Álbum bilingüe, donde cantó en portugués: Água de beber (Jobim-Moraes), O morro (Jobim-Moraes), Fotografia (Jobim-Moraes) y Só tinha de ser com você (Jobim-Oliveira).


Carátula del EP, con nombre que reúnen
buena parte de la historia de la bossa nova.


En 1969, Gilberto parece dejar un poco la bossa para ensayar el pop, versionando Light My Fire. En 1972, el elepé Now trae dos canciones suyas: Zigy Zigy Za y Gingele.
En 1989, la artista Ana Caram grabó una composición de Paulo Jobim, La cumbia. Canción que grabó Astrud Gilberto, en 1996, en su Live in New York. En la canción sí que está el Magdalena, pero poco de cumbia. El mismo año grabó, en dueto con George Michael, Desafinado (Jobim-Moraes), parte de “Red Hot + Rio”.

En 2002, lanzó Jungle, coproducido por el guitarrista Mark Lambert, donde aparecen sus composiciones. Figura allí el bolero clásico Cómo fue (E. Duarte). Por esta época se retira de los escenarios, explorando la pintura al óleo, interés que le venía del padre y que compartió con sus hermanas. Gilberto fue la gran embajadora de la cultura musical brasileña, poniendo en inglés su repertorio fundamental. Siendo ya famosa, se presentó una vez en el Brasil. Prometió no volver a hacerlo y mantuvo su palabra. 

Reconocimientos. Gilberto ganó, en 1992, el premio Latin Jazz USA por su vida musical.  En 2002, se le recibió en el Latin Music Hall of FameEn 2005, The Girl from Ipanema fue escogida entre las cincuenta grandes obras musicales de la Humanidad, por la Biblioteca del Congreso.

Astrud, con Getz y Jobim, en la guitarra. Foto: IMDB.


Revisando su discografía, hallamos algunas piezas en español (además de La cumbia, en portuñol): Tú, mi delirio (César Portillo); Solo el fin (For All We Know: Wilson-James), Historia de amor (Love Story: Sigman-Lai), con Turrentine; En tu piel (Morricone).


Notas.

*Ella misma aclara que no fue Getz quien la descubrió: fue idea de su esposo que ella cantara las versiones en inglés.

**Alguien notó el hecho de que Astrud cometió un error al decir he, en vez de me.

***Del obituario escrito por Marcelo Orozco. Ruy Castro, en Bossa nova, la historia y las historias, afirma que la propia Astrud tomó la iniciativa de cantar, a lo que accedieron Gilberto y Getz. 

****Los nominados al Grammy a mejor artista de 1964 fueron: The Beatles, Petula Clark, Astrud Gilberto, Antonio Carlos Jobim y Morgana King. Billboard, 20-3-1965; p. 6.


Fuentes.

Billboard. Astrud Gilberto, ‘The Girl From Ipanema’ Singer, Dies at 83.

Chilton, M. (2023). Why Astrud Gilberto Is So Much More Than ‘The Girl From Ipanema’.

Dicionário Cravo Albin da música popular brasileira. Astrud Gilberto.


Documento del Instituto Antonio Carlos Jobim, disponible aquí.

martes, 14 de marzo de 2023

Lolita de la Colina: romántica y bailable

Para quienes pensábamos que los grandes compositores de la salsa eran Tite Curet, Rubén Blades y Ómar Alfanno, es una grata sorpresa la figura de Lolita de la Colina, una mejicana dueña de su propia obra como intérprete y autora de uno de los clásicos de la salsa romántica: La noche más linda (1989), vocalizada por Adalberto Santiago. Otra voz masculina, Tito Rojas, le grabó Señora de madrugada (1993). Una canción poco conocida de Cano Estremera también es de su autoría: A mí (1989). Poco divulgado asimismo es el número Un cuarto de hotel, de Frankie Hernández.


La composición de Lolita va muy bien en un elepé titulado Sex Symbol.


Una tampiqueña precoz, como que consiguió que su primera composición se la grabara Olga Guillot, Qué manera de querer (1959). Otra gran intérprete de su obra fue La Lupe, quien le grabó Cualquiera, Todo aquel, Por accidente y La Lupe se ha enamorado. Hallamos también un curioso merengue, cantado por Rolando La Serie: Después te explico. Un bolero, vocalizado por Alci Acosta: Quiero volver a ser tu amante. En este punto, aportó al repertorio de Tito Rodríguez la pieza Voy a inventar (1973). La voz femenina de Blanca Rosa Gil le registró Camas gemelas (1974). Fabby y su Silueta le grabó Ave, María (1993). 


Poco convencional en entrevistas, letras y atuendo personal,
Lolita es lo que debe ser un artista: singular.


Curro Vargas, con el Combo la Revelación de Monchy Lucca, vocalizó Ya no regreso contigo (versión de Lupita D'Alessio). El Conjunto Son 14 le grabó el bolero Dos amores (1987). Llama la atención, por su forma de guaguancó, la interpretación del Grupo Folklórico y Experimental Nuevayorquino de Se me olvidó que te olvidé (1976).


Haciendo honor a su nombre, el Experimental Nuevayorquino
hizo un guagancó sobre la letra romántica de Lolita.


Asegura Lolita que todo lo que ha escrito es autobiográfico, que ha vivido mucho y solo ha requerido pasarlo al papel pautado. Fue censurada en Méjico, por lo que exploró otras plazas, como Puerto Rico, donde su obra llamó la atención de los artistas del género bailable. Todo esto lo cuenta José Arteaga, en La hora faniática

jueves, 19 de enero de 2023

Carlos Arturo, el Señor del Bolero

 La vida nos da sorpresas, máxima musical que aquí tiene aplicación en el elenco de boleristas colombianos. Es anecdótico, por decirlo de algún modo, descubrir un cantante por haberlo oído en un billar. Nunca antes en la radio, incluso la especializada en géneros antillanos, tuvimos noticias del intérprete de Muchas gracias, corazón. De modo que todo es nuevo con esta figura, Carlos Arturo, El Señor del Bolero. 


Excelente título para un álbum del género y buena versión del clásico de
René Touzet. Este llamativo título distingue uno de los
programas más recordados de la radio universitaria colombiana.


Esto es lo que pudimos obtener, buscando en la red: Carlos Arturo González Moreno es su nombre de pila; es paisa (Medellín, 4-7-1951) y su remoquete le vino del éxito del citado Muchas gracias, corazón. La canción, a propósito, es de 1981, composición de Alberto Dimaggio. 

Carlos Arturo ya había grabado un bolero, Pensando en ti, con el Sexteto Miramar, en un sencillo de 1965, al parecer. Con el mismo Miramar grabó La Martina (paseaíto de Consuelo Castro), Tu fracaso, la clásica Señor sereno (), La sota de copas, María Teresa, incluso ya había vocalizado Muchas gracias, corazón. Volviendo al bolero, otra grabación importante es Evocación, de Edmundo Arias. 


Esta, que parece ser la primera grabación de Carlos Arturo, parece como de Pepe
Aguirre: la etiqueta pone Víctor M. Acosta, chileno que también componía valses.


Por la misma senda, grabó un disco completo del género, con el sonoro título de Conversación en tiempo de bolero (R. Touzet), Cuando te fuiste (Garcillazo - Geraldy), Triunfamos (R. Cárdenas), Te quiero más, Tanto que te amé (R. Carreño), Alma destrozada (Bermúdez - Dager), Prisionero (E. Sánchez), Ríete ahora (J. R. Márquez), Tú lo quisiste (M. A. Posada) y Fueron tres años.

Según los conocedores, otro punto culminante de su carrera es el bolero de Luis Kalaff, Corazón de acero (versión de Yayo, el Indio), cuya otra cara traía Copa de vino (Luis Demetrio, versión de Javier Solís, Olga GuillotPeret). En 1987, Cheo Feliciano grabó Empezar de nuevo, de Pedro Azael, que años después vocalizó Carlos Arturo: un bolero que merece mayor difusión.

Con Javier y su Combo, versionó temas bailables como El gavilán (Crescencio Salcedo).

sábado, 31 de diciembre de 2022

Guaranias entre Paraguay y Brasil

¿Qué hacía la brasileña Gal Costa cantando una canción que termina con una invocación al Paraguay? La clave del cuento es el término "guarania", descriptivo de un género musical, escuetamente "canción popular urbana". El nombre, con todo, nos indica urbes del sur de América. La guarania tiene padre y fecha de nacimiento: el compositor paraguayo José Asunción Flores la creó en 1925. Flores tomó el nombre del poema Canto a la raza, de Guillermo Molinas Rolón (1892-1945), donde dice:  «y fue también Guarania, la región prometida como tierra de ensueño, de ilusión y de vida»*.

Hablamos de este género para presentar India, pieza que Flores musicalizó a partir de la letra del poeta Manuel Ortiz Guerrero, cuya obra era popular en la década de 1920. Técnicamente, Flores partió de la polca paraguaya, con tres guaranias que serían las primeras del género: Jejui, Kerasy y Arribeño resay (1928). En 1945, el Gobierno del Paraguay le confirió el rango de Música Nacional. Años después, Flores sufrió exilio por su militancia política.


Flores, perseguido por Stroessner, se exilió a Rusia y a la Argentina.


La guarania se introdujo en el Brasil, gracias al dúo de Cascatinha e Inhana (Francisco dos Santos, 1919–96 y Ana Eufrosina da Silva Santos, 1923–81), que grabó Índia en 1952, versión portuguesa de José Fortuna, vendiendo ese año 300 000 copias (sumaban tres millones, hacia 1995). Éxito semejante conoció Gal Costa con su versión de 1973. La dupla también versionó, en 1956, Recordações de Ipacaraí (Ortiz-Mirkim). Otro gran éxito fue la guarania Colcha de retalhos (Raul Torres**). 

En 2005, Roberto Carlos grabó de nuevo Índia. Hay asimismo una guarania que se hizo antillana: Mis noches sin ti, composición de Demetrio Ortiz (1916-75), de 1943, letra de María Teresa Márquez (1918-2000) (versión de Libertad Lamarque). Conocida en forma de bolero, la han interpretado Los Panchos, Olga Chorens con la Sonora Matancera***, Daniel SantosJulio Jaramillo, Pedro Vargas, Guarionex AquinoJosé Feliciano. En un estilo de balada, Genaro SalinasVicentico ValdésClaudia de Colombia y Nino Bravo.


"Guarania" es la expresión cultural del Paraguay,
como se ve en la revista. Foto: Laura Mandelik.


*El término ya estaba en circulación, al menos desde 1920, cuando Juan Natalicio González fundó la revista Guarania. Antes, incluso, Moisés Bertoni, el naturalista, anarquista y colono suizo, usó el término con referencia al territorio de los guaraníes ["Me he permitido designar con este nombre a la inmensa región poblada o dominada por los guaranianos". Resumen de prehistoria y protohistoria de los paises guaraníes. Conferencias de 1913], misma época en que aparece en la poesía En la fiesta de la raza, de Molinas Rolón. Cf. Andrea Tutte, 100años de Guarania, la revista del "Paraguay eterno".

**Raul Torres (1906-70), músico y compositor paulista, a quien se acredita la introducción de la guarania en la música sertaneja (bucólica e interiorana). El Dicionario Cravo Albin define "guarania" así: "Gênero de origem paraguaia, em andalento lento, geralmente em tom menor". Afirma que Torres, junto con Ariovaldo Pires, Mário Zan y Nhô Pai, conocieron la guarania en sus viajes al Paraguay. Indica, además, que el adaptador de la guarania fue José Fortuna (1923-83), y que el género se popularizó entre los compositores de música sertaneja, en la década de 1940. 

***Olga Chorens dio una entrevista a sus 95 años, en 2019. ****Parece haber versiones brasileñas anteriores a la de Cascatinha: como la de Amado Smendel, 1942.


Ortiz y Flores, los creadores de la guarania, unidos en esta producción musical.