jueves, 2 de abril de 2015

Celina González: afrocampesina

En entrevista para Javeriana Estéreo, Celina González confiesa que su esposo, Reutilio, se quedó con las ganas de conocer a Colombia. Por falta de un contrato...


Foto: CIDMUC, La Habana.

Campesina y africana.

Siendo notoria la particularidad de la música de Celina y Reutilio, hacía falta que ella misma la expresara para que quedara clara: temas africanos en el molde campesino, es decir, canciones de santo puestas en décimas. 

Santa Bárbara bendita, 
para ti surge mi lira
y con emoción se inspira 
ante tu imagen bonita.
Con voluntad infinita, 
arranco del corazón
la melodiosa expresión, 
pidiendo que desde el cielo
nos envíes tu consuelo 
y tu santa bendición.

Una décima perfecta, con la cantidad de versos que su nombre indica, octosílabos, excepto los de final agudo (heptasílabos), con rima abbaaccddc.

De Oriente para el mundo.


De la colección de Cristóbal Díaz Ayala.

Cuenta Celina que, siendo famosos en Cadena Oriental de Radio (1947), pero deseando el reconocimiento nacional, santa Bárbara se le apareció para comunicarle que la cosa dependía de que le cantara a ella. Celina se excusa diciendo que no sabe cómo hacerlo, a fuer de campesina criada en un bohío; pero la santa le dice que aprenderá y que, cuando le cante, paseará el mundo. Es más, le asegura que el dos de noviembre estarán en La Habana, pero que debe componerle el número que caminará el mundo. 
Imagínense el embarazo de Celina cuando, en la fecha anunciada (1948), estaba con Reutilio en la capital, contratados por Radio Cadena Suaritos, sin habérsele ocurrido un verso para la santa. Apremiada, le cuenta el caso a su esposo, quien la anima a que emplee sus ingénitas dotes de poetisa. Resultan así las tres décimas del número A santa Bárbara, más conocido por su coro, que fue lo último en componerse, por divina inspiración.
La ayuda terrenal la prestó Ñico Saquito, quien le presentó a Laureano Suárez, Suaritos, una grabación del dueto oriental. 
La canción, que canta a la divinidad en sus nombres católico y santero, ya era éxito en enero de 1949. De ello da fe un redactor de Carteles*, declarando que andaba en boca de todos, por todas partes. Curiosamente, pensaba que la inmortalidad de Viva Changó (ya desde entonces título alterno) dependía de que la vocalizara un grande como Daniel Santos o Rita Montaner... Pocos saben hoy quién fue Rita.

Celina y Colombia.




Ya se dijo que Reutilio no conoció a Colombia. Solo con la revitalización del dueto, en compañía de Reutilio hijo, se dio la venida al país, para una Feria de Cali, en 1984. Luego se presentaron aquí con frecuencia, al punto de que Celina afirmaba ser esta su segunda patria.
Un testimonio grabado de dicha relación puede ser la canción Décimas a Colombia, con texto de Nicolás Guillén. No encontramos en la red el audio, pero los dejamos provocados con el inquietante apóstrofe:

¡Oh Colombia, prisionera,
orquídea puesta en un vaso!

*Citado por Ned Sublette, Cuba and Its Music, p. 565.