jueves, 21 de diciembre de 2017

Carlos Molina, otro músico colombiano desconocido

La presencia de Colombianos en Estados Unidos no es tan reciente como uno imagina. Incluso hay pioneros en la historia del tango, como el paisano Carlos Molina. Los datos biográficos vienen de Cristóbal Díaz Ayala, quien lo da por bogotano y nacido en 1902. En la Capital del Mundo dirigió varias orquestas y se desempeñó como director musical de RCA Victor. Allí mismo murió, en 1958.



La carrera de Molina coincidió con lo que se conoció como fiebre de la rumba en Estados Unidos, desatada por el éxito de El manisero, en 1930. Tres orquestas se disputaban el aplauso del público: la de Madriguera, la de Cugat y la de Molina, los dos últimos violinistas.
La discografía registrada principia con ¿Qué tienes en la mirada?, en 24-3-30.


Poco conocido era el bandoneón en Estados  Unidos,
según esta nota de The Billboard, 11-3-44.


Luego, con Negra consentida (Pardavé), Lamento borincano (Hernández)La cachimba de San Juan (Piñeiro), La comparsa de los congos (Grenet), La comparsa (Lecuona), Odiarte quisiera (Castro), Tabú (Lecuona), Pa ran pan pan (Karlo), Cui cui (Curbelo). Aquí es forzoso detenerse: el anterior número es una conga, grabada en 1939. Hemos averiguado que los orígenes del baile en Estados Unidos se remontan a 1936, cuando Eliseo Grenet funda el Yumurí en Nueva York. Allí precisamente presentaba el espectáculo La conga. Hay, sin embargo, una conga anterior, obra del mismo compositor: La comparsa de los congos lucumí (27-9-32, que ya citamos en versión de Molina, más pausada). Es decir, el colombiano está entre los primeros que grabaron dicho ritmo en Norteamérica.  


Reseña de la orquesta de Molina, competidora de la de Cugat.
The Billboard, 5-8-48.


Make Love With A Guitar (Grever-Leveen). Pobre Sebastián (Lemaitre, versión de Myrta Silva), IncertidumbreKoki koka (Valdés), Nocturnal (Mojica-Marroquín), Chiqui cha, Tilín tilín tilán (Gutiérrez; Maño López canta a la manera de Miguelito), La tierra va a temblá. Volveré.
Otra etapa de su actividad musical se consagró al mambo: Al compás del mambo (Pérez P.); Mambo #8 (), Eso no (Cáceres-Sandoval)Cao cao, maní picao (Carbó M.), Tico tico (Abreu).   

Del capítulo tanguero, quizá el primero, tenemos: La cumparsita (Matos), Farolito de mi barrioSon cosas de la vida (J. - E. Bohr), en 16-3-30; Atorranta (Bohr), en 24-3-30; Tras las rejas (Rosello-Bohr), en 10-4-30 Don Juan (E. Ponzio) y Alma en pena (A. Aieta), grabadas en 7-2-33; Gypsy Lament (Gréver).
El pasodoble Silverio (Lara).


Reseña de un sencillo de Molina, advirtiendo la interpretación del vocalista
Bobby Rivera, en la línea de Miguelito Valdés. The Billboard, 4-8-45.


Fuentes:

Discography of American Historical Recordings.

Continuum Encyclopedia of Popular Music of the World. Volume II: Performance and Production. Continuum: 2003. En línea.



Reseña de un show en Los Ángeles, con todo y bongosera.
The Billboard, 18-10-47.

martes, 12 de diciembre de 2017

Myrta Silva, la Tremenduca

No hay acuerdo sobre la fecha de nacimiento de Myrta (¿1923? -1987), gran cantante, compositora y percusionista. En todo caso, su vida artística principia en la década de 1940. 


Con Rafael Hernández. Fuente: Pinterest.

Primeras composiciones: Cuando vuelvas y En mi soledad. En el 42 la tenemos cantando para el circuito CMQ de La Habana y luego estrenando su Así es la vida y Fácil de recordar. Del mismo año, Tu pito no suena ya (C. Puebla), una parodia de Ahora seremos felices.
De la época del Cuarteto Victoria queda La tartamuda. Con el fin de la década llega a la cima de la popularidad: la RCA Victor argentina la premia por sus ventas 1947-9 y en Cuba será la artista extranjera más popular. Su triunfo isleño se debe, claro, a las grabaciones con el conjunto Sonora Matancera: tres guarachas y un montuno de su propia inspiración, Qué corto es el amor. Entre los registros en vivo también hay números de ella: No me toques, que te quemas; No sé por qué; Por algo será; Yo me voy contigo y La tremenduca.  


En Caracas, 1945. Hemeroteca de la música popular en Venezuela.
  
Canta con la orquesta del violinista colombiano Carlos Molina (pionero de las orquestas de tango en USA) Sí, mi hijita linda. Se le tiene por la primera mujer inscrita como percusionista en la Federación de Músicos (de Puerto Rico o de Estados Unidos, según la fuente). 


En Ferrocarriles Unidos de Cuba, 1950.

Con otras orquestas: Mi delitoMis tres noviosLa vida es un problema, su composición Quiero volver a La HabanaLos hijos de Buda¡A callarse!El bombón de Myrta, Rumba desaforá, ¡Échale tierra y tápalo!. No pueden faltar Camina como Chencha (Saquito), Esos no son de aquí y Buche y pluma na ma (Hernández), Nada. Luego hizo televisión, haciendo su rutina o invitando músicos.       


Reseña de Myrta Silva en un club de San Francisco. Nótese que cantaba y hacía
una rutina cómica. The Billboard, 6-2-1943.

miércoles, 6 de diciembre de 2017

Bayardo Velarde: percusionistas de la Costa Oeste

Bayardo Velarde (1929-2015), panameño de la capital, se trasteó al Norte en 1945. Como no pudo seguir pagándose clases de saxo, aprendió por su cuenta percusión. Oyendo los discos de Tito Puente dominó conga y bongó, de suerte que se estrenó tocando en el Alonzo Palio Quartet, en North Beach. A fines de la década de 1940, la escena estaba dominada por unos cuantos grupos mejicanos.

Edgardo Rosales, maracas; Tjader en los timbales; Carlos Durán, bajo;
Bayardo Velarde, congas; 
Manuel Durán, piano. Foto: colección de Robert C. Tjader. 


Tocaba aquí y allí, fue a Nueva York a mirar y, vuelto al Área de la Bahía, tenía una llamada de Cal Tjader. El vibrafonista, incapaz de decir Bayardo, comenzó a llamarlo Benny. 
Con Tjader grabó en la época del quinteto que tocaba principalmente mambo: Lucero (Tjader), Autumn Leaves (Prévert-Kosma); Mambo At The M (Kant)I've Waited So Long (Tjader); Laura (Raksin-Mercer), Philadelphia Mambo (Puente). Por esta época, los músicos de Tjader forman un grupo que tocaba en The Copacabana. La banda contaba con los hermanos Durán y el conguero Luis Miranda. Allí le ofrecen trabajo si forma su propia banda, que se llamará Benny Velarde y sus Pachangueros, lo cual nos da la pista sobre la fiebre musical del momento. En ese club y con dicha formación pasó la década de 1960. Graba el trabajo Ay qué rico (1962), donde dejó campo para los boleros Si te contara (F. Reina), Tu manera de ser (B. Collazo), que canta Felo Brito; Baila mi guaguancó (Velarde-Durán), Las guajiras (Santamaría). Pasa a un formato más grande, dirigiendo el Super Combo. Luego lo contratan para un proyecto de grabación con Lalo Schifrin, que queda trunco. Del compositor y pianista quedó Latin Slide y de Velarde Road Runner. En casi cuarenta años, el Super Combo produjo solo un disco (2003), Viva Velarde, Tenderly (Gross-Lawrence), Tranquilízate (Velarde), El divorcio (A. Rodríguez), Viva Cepeda (Tjader), número dedicado al pelotero Orlando Cepeda, novato del año 1958. Aquí lo vemos descargando con Tito Rodríguez. Repasa Yolanda pachanga, canción que le dedicara a su esposa, bailarina cubana, cuando el ritmo estaba de moda.
En 2011 y a instancias de un locutor, le organizaron un concierto de homenaje por los sesenta años de carrera musical en la región. 

Fuentes:
Benny Velarde, Bay Area Latin Jazz Master
Latin Jazz Conversations: Benny Velarde